El respaldo de la cama es un elemento al que no le prestamos excesiva atención a la hora de elegir la cama y decoración del dormitorio. Pero una vez terminada nos damos cuenta de que se convierte en uno de los protagonistas.
Construir tu propio respaldo no es nada complicado y te permite elegir entre infinitas composiciones. El paso a paso se puede adaptar a cualquier medida y forma. El resultado puede ser muy distinto en función de la tela que elijas, pero esta tiene que adaptarse a la decoración de tu dormitorio (a los colores de las paredes y/o el mobiliario).
Necesitarás:
-Tabla de madera (un tablero de fibrofácil o MDF de entre ½ y 1 cm, o un viejo respaldo para reciclar).
-Gomaespuma de la misma medida que la tabla más 5 centímetros en cada uno de los costados.
-Tela para tapizar
-Pegamento de contacto
-Engrampadora
Paso a Paso:
1- El primer paso será dibujar sobre la base de madera elegida, las medidas o la forma que le querés dar y recortarla.
2- Luego hay que aplicar pegamento de contacto en las dos superficies a unir: la pieza de madera y la pieza de gomaespuma. Después de aplicarlo, hay que esperar los minutos que el producto recomienda para que se evapore el solvente y haga mordiente. Una vez que ha pasado el tiempo estipulado, ya podemos unir el tablero y la gomaespuma.
3- Para tapizar, primero colocar la tela encima de la mesa, y que esté bien extendida. Luego colocar la pieza de gomaespuma con el tablero (ya unido) sobre ella.
4- A la hora de empezar a tapizar, comenzar haciendo una cruz: colocar dos grampas en el centro de cada lado. Comprobar que la tela esté bien tensa. La manera de continuar será la siguiente: del centro hacía las esquinas. Al llegar a los lados del tablero, cortar la tela sobrante que pueda molestar para tapizar. Primero tapizar un trozo, y a continuación el sobrante colocarlo encima del anterior, de modo que quede todo bien tenso.
De esta manera tan sencilla conseguiste crear un respaldo de cama sencillo para el dormitorio y darle un toque más actual y moderno a su decoración.
Tips extras:
-Podés sumarle alguna capa de guata para hacerlo aún más acolchado y mullido.
-Es ideal que la tela para tapizar sea medianamente gruesa y resistente. Recomendamos que además sea antimanchas, en lo posible, por el roce de las cabezas. También podría ser cuerina, dependiendo del gusto de cada uno.
-Lograrás una ambientación increíble si la tela es estampada o rayada, y si lo acompañás con almohadones haciendo juego o en composé, más todavía.
-Si lo deseás, podés fijarlo en la pared.
–Para darle un acabado capitoné, dibujá una cuadrícula en la parte trasera y perforá esos puntos que se formaron con un taladro. Una vez tapizada, pasá una aguja con hilo resistente por el orificio y colocá un botón a cada extremo. Tensá el hilo y te dará esa forma acolchada deseada. Se aconseja usar botones forrados para darle una terminación más prolija al capitoné.
-Podés hacer el cabecero de una única pieza o hacer una composición de varias piezas forradas.
-Otra opción para decorarlo, es agregar tachas alrededor como terminación.
