A todos nos gustan los ambientes abiertos, con mucha luz y espacio libre, pero a veces es difícil que un hogar sea funcional a través de ellos. Cuando debes realizar más de una actividad en un mismo espacio, puede que sea necesario un poco de separación entre ellos. En un hogar, el exceso de paredes, pasillos y puertas pueden hacer que los espacios se vean muy pequeños y oscuros, por lo que en muchas estancias se elige unificar varios ambientes para crear espacios más grandes con muchas funciones en su interior. Sin embargo, hay veces que necesitamos separar las funciones en un mismo espacio para poder ganar privacidad, tranquilidad o simplemente esconder el desorden en uno de los lados. Por ello, en este artículo te traemos muchas opciones a la hora de separar ambientes, sin recurrir a los clásicos tabiques y puertas.

Mira a continuación las ideas para separar un ambiente, pero manteniendo la sensación de que se trata del mismo espacio. Iremos viendo ideas desde una separación completa, a una más integrada, manteniendo la fluidez de la luz en casi todos los casos.

Con paredes en seco

Las paredes en seco o Durlock por su nombre comercial, son ideales para generar una separación de ambientes sin una gran obra. Se puede optar por paredes que no toquen el piso o el techo, para dejar que la luz fluya a través de esos espacios. Por otro lado, también podés construir la pared en cierto lugar que quieras esconder, sin tener que hacerla recorrer todo el espacio, a diferencia de una pared tradicional. Esta idea también es genial para colgar algo de decoración, esconder instalaciones y sirve de fondo para cualquier ambiente.

Muebles dobles o simples

Si querés un separador de ambientes que provea funcionalidad por ambos lados, podés elegir un mobiliario doble como puede ser una estantería o un armario, un placard. A diferencia de la pared, esta idea ocupa más espacio, pero también otorga mayor funcionalidad a cada área. Lo ideal será hacer este mueble a medida, para poder determinar el tamaño que tendrá la separación y hacer que no llegue hasta el techo, para permitir la fluidez de luz. Incluso, es una gran idea que tenga puertas de ambos lados si necesitás ampliar el lugar de guardado o para ganar practicidad y disponer de un mobiliario en cada nuevo ambiente. Este tipo de muebles no logra una separación total, pero es un elemento fijo que bloquea las visuales de un lado a otro.

Al igual que la idea anterior, pero en este caso puede hacerse con un armario o estantería cerrada que compres, teniendo en cuenta las medidas adecuadas. La luz pasará por encima y los costados del mueble, pero es un elemento fijo que no podrás regular, a diferencia de otras ideas.

Una estantería abierta también delimita zonas, mientras que te ayuda a organizar y decorar el ambiente. Esta idea es una de las más usadas por su facilidad y practicidad a la hora de dividir y sumar espacios de guardado, por lo que es un recurso a considerar, sobre todo en espacios públicos como el living, el comedor o para generar pasillos.

Puertas plegables o corredizas

Esta es otra manera de bloquear completamente la unidad visual entre dos espacios, pero que puede regularse según las necesidades. Las puertas plegables te aseguran una separación completa, sobre todo si son de un material sólido como en este ejemplo. Esta idea es genial para cuando quieres ganar total privacidad entre dos espacios, tanto visual como acústica, pero que puedes modificar según tus gustos, a diferencia de la pared en seco o un mueble, que es un elemento fijo.

En vidrio u otros materiales, las puertas corredizas obviamente, te permiten variar la separación entre los espacios, dándoles integración cuando quieras. Estas puertas son geniales para dar privacidad a algunas áreas, pero integrarlas cuando quieras para ganar amplitud visual en el espacio. A diferencia de las puertas plegables, este tipo de puerta dejará pasar un poco el ruido entre los espacios, por lo que no es una separación completa. Sin embargo, es un sistema mucho más fácil de instalar y que casi no ocupa espacio, por lo que es ideal para hogares pequeños.

Grandes ventanales

Para mantener la fluidez visual y lumínica de un espacio, las paredes de vidrio o cristal son una solución ideal, podés además agregar puertas corredizas de vidrio, sumando la opción de separación total. Esta idea es muy usada para separar las cocinas abiertas del comedor o del living, ya que mantiene la unión, pero evita que pasen los olores y ruidos de la cocina a otros ambientes. Una idea similar a la anterior, pero con otras posibilidades, son los ventanales, que aportan un detalle de diseño genial para separar ambientes. Pueden ser paños fijos, como en este caso, o colocar ventanas que al abrirse sirvan de comunicación entre los espacios, como pasaplatos por ejemplo entre la cocina y el comedor.

Otros materiales y elementos

Las lamas son piezas planas y alargadas que sirven para controlar la luz. Pueden ser de muchos tamaños y materiales (hormigón, metal, madera, etc.) y pueden ser móviles o fijas. Una idea que te permite la unión o separación total según tus necesidades son las lamas verticales móviles, que funcionan como persianas. En general, este elemento es usado en un sector y no a través de todo el espacio, por lo que genera privacidad en una porción del ambiente. También se puede pensar este tipo de división como paredes fijas y que no se regulen como en la idea anterior, pero eligiendo una separación más grande o pequeña entre los elementos, y así regular la separación visual de los espacios. La gran ventaja de esta división es que bloquea la vista, pero deja pasar la luz al otro sector. Actualmente las de madera son la opción más elegida, por su calidez, estilismo y decoración. Además, es muy posible hacerlo uno mismo.

Los paneles perforados fueron muy usados en la arquitectura para bloquear las visuales, manteniendo una cierta unidad. Hace años se aplican en interiores, para lograr una división de espacios con diseño y elegancia. Actualmente, podemos encontrar muchísimos diseños de celosías que se adaptan a hogares clásicos o modernos por igual. Dependiendo de la complejidad del diseño, tendrás una mayor o menor comunicación visual entre los espacios.

Cortinados

Las cortinas pueden suplir perfectamente el papel de las puertas y con menor impacto visual. Añaden además textura a la decoración al mismo tiempo que actúan como separadores de ambientes. Pueden ser más opacas o traslúcidas como queramos y pueden jugar a ocultar aquello que no queremos que se vea. Con caída o sin ella, la verdad es que son un elemento que se puede adaptar de una y mil maneras. Solas o combinadas con mamparas, son una buena solución para separar ambientes. Separar las zonas de almacenamiento del resto de la dependencia es un uso que se le puede dar a las cortinas, como, por ejemplo, diferenciar el área del vestidor del área de descanso.

Un sistema de cortinas que rodee la cama en un loft o monoambiente puede darle un poco de intimidad y sobre todo dar la sensación de sentirse más protegido y aislado cuando se está en la cama. El factor psicológico es fundamental en el uso de cortinas en el dormitorio. Muchas personas necesitan sentirse arropadas para poder dormir. También puede ser muy útil para separar el escritorio, área de trabajo o recreación. Esta solución es muy práctica y fácil de llevar a cabo.

Hay que tener en cuenta el estilo decorativo para usar un tipo de cortinas u otro. Una cortina de macramé, por ejemplo, apenas dificulta la visibilidad, pero es un claro elemento de separación de ambientes con un estilo muy particular.