¿Tenés envases de plástico molestando en tu patio, garaje o lavadero? Dales una nueva vida. Es hermoso desarrollar la imaginación, agudizar el ingenio y también aprender a crear ideas de reciclaje y reutilizar para evitar generar tanto desperdicio. Por eso, en esta oportunidad, te vamos a ayudar a que le des nuevos usos a los tarros de de pintura, los cuales muchas veces sólo se usan como baldes para agua o simplemente finalizan en la basura luego de que terminamos de pintar y raramente son reciclados, además ocupan mucho espacio en los tachos de basura.
Te mostramos suficientes ideas como para poder llevarlos a otra dimensión y reutilizarlos. Los envases de plástico donde viene la pintura para paredes y techos pueden ser de 4 y de 20 litros. Pero, como todo, puede tener un nuevo uso en tu hogar. No sólo ahorrarás dinero, ya que tendrás la oportunidad de tener nuevos objetos útiles en tu casa, sino que también el medioambiente. Son resistentes y durables, lo que hace que su uso pueda prolongarse más allá de la idea para la que fue creado. Para realizar cualquiera de estas ideas que te proponemos, previamente deben limpiarse los restos de pintura en su interior.
- Recipiente para jardinería. Si eres un aficionado a la jardinería, podés usar un envase de 20 litros para almacenar abono o compost. Se suelen utilizar para cultivar tomate y algunos frutales. También puede ser el lugar ideal para juntar agua de lluvia y que tus cultivos gocen de un riego natural y libre de cloro.
- Organizador de artículos o juguetes. Esta opción es la más simple de todas. Cualquiera de estos envases, del tamaño que sea, podes utilizarlos para organizar objetos del hogar. En tu garaje, jardín y hasta en la habitación de los más pequeños. Podés pintarlos con algún motivo o diseño preferido o, usar distintas técnicas, como la técnica de decoupage, entelado o papel maché para darle un nuevo acabado.
- Organizador original. Con los envases más pequeños, pintálos de diferentes colores y afianzalos a la pared de manera horizontal, o colgalos de algún barral, por ejemplo, dejando la parte abierta hacia fuera. Podés poner la cantidad que quieras generando diferentes diseños. Podrás usarlas a modo de estantería y colocar decoraciones, lápices, toallas, zapatillas o los objetos que quieras.
- Para tus mascotas. Si tenés perros o gatos, podes usarlos también para conservar su alimento. Es muy práctico.
- Cesto de basura. Del mismo modo podés poner uno de estos envases en cualquier parte de tu casa, pintado como más te guste o al natural y usar como tacho de basura.
- Maceta. Estos baldes son un elemento ideal para el cultivo de plantas grandes o arbustos sin la necesidad de grandes extensiones de tierra. Esto le dará vida a tu patio y la oportunidad de tener plantas sin la necesidad de salir a comprar una gran maceta. Los podés pintar del color que quieras y dejarlos así lisos o decorarlos a tu gusto. Hoy se ven mucho los maceteros con textura tipo arena o negros lisos. ¿Qué te parece pintarlos de ese color? Otra idea es revestirlos en madera y barnizar.
- Lavadero. Si no tenés lavarropas o tenés, pero necesita arreglo, no dudes en usarlos para lavar tus prendas o platos.
- Tambor. Cortamos dos trozos redondos de cuero o ecocuero, teniendo en cuenta que el borde tiene que colgar por lo menos tres centímetros. Podés marcar la zona que debes cortar presionando ligeramente en el envase. Con ayuda de un perforador, hacemos unos agujeros que estén a la misma distancia entre ellos para poder poner un cordón o hilo grueso después. Presentar en la parte superior y en la inferior los trozos de cuero o ecocuero en el envase, e introducir la cuerda en ambos trozos de cuero, uniendo el de la parte superior y el de la inferior, apretando y atando un nudo en el extremo.
- Muebles improvisados. Uno de estos envases con una madera o plástico resistente arriba puede ser una mesa improvisada para pasar una tarde en tu jardín, también pueden hacer de sillas (con almohadón incluído). Si te das un poco de maña podés transformarlos en unos hermosos puff para tus habitaciones.
- Cobertor de plantas. Hay plantas, como las rosas, que durante el invierno sufren con las condiciones ambientales. Uno de estos envases de plástico les puede salvar la vida. Usalos para cubrirlas durante la noche, pero no olvides retirarlos, ya que durante el día necesitan de la luz solar.
- Compostera. Podés utilizar varios envases de 20 litros para hacerla. Después de limpiarlos muy bien, vamos a hacer varios agujeros en la parte inferior de los envases. En este caso, se utilizó una broca de 6 mm para acero, que no deja rebabas en el plástico. También tenemos que hacer agujeros más pequeños, con broca de 3 mm a los lados, para ayudar a que el oxígeno penetre, y también en la tapa. La tapa de los otros dos baldes se debe quitar, para que los gusanos puedan subir y bajar libremente por el compostador. Podes dejar solamente el borde como puede verse en la foto de abajo. Si producís más residuos podés aumentar más plantas al sistema, añadiendo más envases.
Es cuestión de conectar con tus necesidades, ya sean esas que tenés cuando querés hacer alguna manualidad, o la de reciclar para no generar un mal impacto en el planeta. O, por qué no, ambas. Pero recordá que siempre es bueno darle una nueva vida a eso que estás por tirar a la basura.
Y, en el caso que decidas no reutilizarlos más, estos envases son reciclables. La mayoría están compuestos de PEAD (polietileno de alta densidad), es un termoplástico fabricado a partir del etileno (elaborado a partir del etano, uno de los componentes del gas natural). Es muy versátil y se lo puede transformar de diversas formas: Inyección, Soplado, Extrusión, Rotomoldeo. Los baldes plásticos pueden ser reciclados como cualquier tipo de plástico. Los debes disponer en los contenedores para tal fin.
